lunes, 3 de junio de 2013

Erich Fromm

Erich Fromm
Pablo GyC

Erich Fromm
(Frankfurt, 1900 - Muralto, 1980)
Destacado psicoanalista,  psicólogo social y filósofo humanista alemán. Del psicoanálisis parece apreciar sobre todo la crítica a la sociedad occidental, y de Marx, el proyecto humanista. Estudió la licenciatura en Sociología y Psicología, en Heidelberg. Al finalizar ingresó en el Instituto de Psicoanálisis de Berlín, pero permaneció al margen de la Asociación Internacional Freudiana. En 1934, emigró a América por cuestiones raciales, y vivió en Nueva York y en Cuernavaca (México).

Fue requerido por las más prestigiosas universidades y junto con otros dio vida a la llamada Escuela Neo-freudiana "culturista", la forma más importante de revisionismo del psicoanálisis surgida en Estados Unidos, que fue rechazada y criticada por los ortodoxos por dar una lectura parcial de los textos freudianos.

Algunas de las ideas de Erich Fromm (como el análisis de la "autoridad racional") sobrevivieron y ejercieron de manera indirecta, una influencia determinante.

Su obra: Una escuela de vida, Las cadenas de la ilusión: una autobiografía intelectual, ¿Podrá sobrevivir el hombre?, Del tener al ser, El amor a la vida, El arte de amar, La vida auténtica, El arte de escuchar, El dogma de Cristo, El humanismo como utopía real, El miedo a la libertad, Espíritu y sociedad, Ética y política, La atracción de la vida, La condición humana actual, La crisis del psicoanálisis, La patología de la normalidad, Lo inconsciente social, Sobre la desobediencia, Y seréis como dioses, Anatomía de la destructividad humana, El corazón del hombre: su potencia para el bien y para el mal, Ética y psicoanálisis, Grandeza y limitaciones del pensamiento de Freud, La misión de Sigmund Freud: su personalidad e influencia, La revolución de la esperanza: hacia una tecnología humanizada, La sociedad industrial contemporánea, Marx y su concepto del hombre, Psicoanálisis de la sociedad contemporánea: hacia una sociedad sana, Sociopsicoanálisis del campesino mexicano: estudio de la economía y la psicología de una comunidad rural, El lenguaje olvidado, Psicoanálisis y religión.

Fromm no fue un psicoanalista convencional, sino más bien un agudo, aunque a veces sectario, psicólogo social o tal vez un librepensador, crítico de ideologías políticas, religiosas y terapéuticas, y un valiente investigador e innovador. Como ejemplo basta citar su Budismo zen y psicoanálisis (1960), escrito en colaboración con D. Suzuki y R. de Martino.

Se le considera uno de los iniciadores de la escuela culturalista psicoanalítica estadounidense, cuya metodología busca resolver la neurosis del hombre moderno, que, según Fromm, radica en el distanciamiento existente entre las estructuras sociales y el individuo, anteponiendo una planificación humanista de la vida frente a las teorías del consumo y del rendimiento económico.

Sus intereses se centraron en la definición de una nueva "ciencia del hombre", capaz de orientar la formación de una personalidad equilibrada dentro del caos cultural, la violencia y la soledad que constituyen las perversiones del totalitarismo en la sociedad contemporánea. Entre los principios inspiradores de esta crítica al mundo actual se encuentran la obra de Marx y la de Freud, a las que añadió más adelante la influencia del budismo zen, al considerar Fromm como digna de aprecio su noción de "iluminación" entendida como desarrollo de las cualidades intuitivas del ser humano.

No puede decirse que Fromm sea marxista ni freudiano: de Marx y de Freud recoge en particular los elementos críticos y liberadores, abriendo una perspectiva que puede definirse como existencialista o idealista con un notable acento místico. Contra el determinismo económico, Fromm basa su análisis de la sociedad en el concepto de inconsciente social, que representa la parte socialmente reprimida de la psique universal. La realización del amor, de la justicia y de la libertad se conseguirá cuando se satisfagan de manera correcta las necesidades radicales del hombre: la exigencia de relaciones espontáneas, una dimensión trascendente y creativa, una plena expresión de la individualidad, una fe capaz de orientar los comportamientos, una fraternidad universal.

En 1926 contrajo matrimonio con la psicoanalista Frieda Reichmann. A fines de la década de 1920 Fromm comenzó su formación como psicoanalista en el Instituto Psicoanalítico de Berlín con un discípulo de Freud que no era médico: el jurista Hanns Sachs. En ese tiempo, él y su esposa abandonaron la vida religiosa ortodoxa judía. Desde 1929, Fromm ejerció como psicoanalista "lego" (los por aquel entonces llamados Laienpsychanalitiker, término alemán para referirse a los no médicos) en Berlín. En esta época comenzó su interés y estudio por las teorías de Marx. En 1930 fue invitado por Max Horkheimer a dirigir el Departamento de Psicología del recientemente creado Instituto para Investigaciones Sociales (Institut für Sozialforschung).

En 1931 se divorció de Reichmann, con quien mantuvo una estrecha amistad de por vida. El 18 de diciembre de 1953 volvió a contraer matrimonio con Annis Glove Freeman. Desde mediados de la década estuvo fuertemente involucrado con los movimientos pacifistas norteamericanos, y fue un destacado oponente de la guerra de Vietnam.

En 1949 se traslada a Cuernavaca (México) a raíz de la enfermedad de su segunda esposa en busca de un clima más propicio para su restablecimiento donde realiza un importante trabajo de enseñanza y difusión del psicoanálisis. Su presencia en el medio provoca a un grupo de médicos a buscarle para solicitarle análisis y formación psicoanalítica. De ese grupo surgiría la Sociedad Mexicana de Psicoanálisis en 1956. Trabaja en la Universidad Nacional Autónoma de México, dirige la colección de Psicología y Psicoanálisis de la editorial Fondo de Cultura Económica, practicando igualmente el psicoanálisis y supervisando el trabajo de sus discípulos.

Entre 1957 y 1961 Fromm compaginó su actividad en la UNAM con una cátedra en la Universidad Estatal de Míchigan. En 1965 se retiró; tras unos años de viaje, en 1974 se instaló en Muralto, en Suiza. Murió en su hogar cinco días antes de su octogésimo cumpleaños.

Este gigante del pensamiento tradujo parte de los problemas sentimentales, afectivos y existenciales que vivió, en reflexiones profundas cuya trascendencia es enorme. Su palabra, hecha verbo de vida en sus escritos, nos deja un legado valioso. Como colofón de este sencillo esbozo de su vida, valgan sus siguientes citas, muy pocas, muy significativas:

 “Debemos adquirir conocimiento para elegir el bien, pero ningún conocimiento nos ayudará si hemos perdido la capacidad de conmovernos con la desgracia de otro ser humano, con la mirada amistosa de otra persona, con el canto de un pájaro, con el verdor del césped. Si el ser humano se hace indiferente a la vida, no hay ninguna esperanza de que pueda elegir el bien. Entonces, ciertamente, su corazón se habrá endurecido tanto, que su “vida” habrá terminado” 

“Hay que destacar los logros de la especie humana y no los de una nación en particular; emprender una lucha unificada contra la enfermedad, por la diseminación del conocimiento y del arte. Buscar la igualdad, la libertad y la dignidad de los seres humanos; olvidar la soberanía nacional y tomar la soberanía de la humanidad. Buscar en la educación la orientación científica y la enseñanza de la filosofía y la antropología humanistas”.

“La experiencia humanista consiste en sentir que nada humano es ajerno a uno, que ‘yo soy tú’, que un ser humano puede comprender a otro ser humano porque los dos participan en los mismos elementos de la existencia humana”.

“Vivir es nacer a cada instante.”

“El peligro del pasado era que los seres humanos fueran esclavos. Pero el peligro del futuro es que los seres humanos se conviertan en robots.”

“Dar produce más felicidad que recibir, no porque sea una privación, sino porque en el acto de dar está la expresión de mi vitalidad.”

“Si una persona ama sólo a otra y es indiferente al resto de sus semejantes, su amor no es amor, sino una relación simbiótica o un egoísmo ampliado.”

“En el arte de vivir, el ser humano es al mismo tiempo el artista y el objeto de su arte, es el escultor y es el mármol, el médico y el paciente.”

“La paradoja del amor es, ser uno mismo, sin dejar de ser dos.”

1 comentario:

  1. Me acordé de una frase tuya: "Ay vida, qué emoción vivirte"...
    Felicidades por la entrada. Me encanta la idea de recordar a grandes personajes como él y aprender de su vida por medio de este blog.

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